En este
momento doy un giro en el tema de aprender a motivar desde la educación y
dentro del aula de clase, para ubicarme un paso adelante y ser una herramienta
en el gigantesco mundo laboral; y es aquí donde debo aplicar un poco de lo
aprendido en el aula de clase y en los diversos diplomados y estudios
realizados en estos últimos años.
Verdaderamente es un cambio sustancial pero en ningún caso
des-contextualizado ya que luego de que todo joven o adulto pasa por las aulas
de clase tanto de colegio como universitarias quiere ingresar por el virtuoso
mercado laboral, y no nos digamos mentiras muchos de los estudiantes de
colegio, sin muchas ganas de seguir estudiando buscan con afán este
espacio en donde su labor indistintamente encuentra una
remuneración salarial, sin embargo en mi concepto humilde y desde el
desconocimiento el deber
ser es continuar con sus
estudios.
No obstante el mercado laboral no es fácil, ya que este cada
día más busca lo mejor de esa oferta, es decir en otras palabras las
empresas y las compañías demandan lo mejor y lo más calificado de esa
oferta laboral allí latente.
Actualmente desde mi quehacer cotidiano como Economista Industrial
e Intermediador Laboral de la Oficina Pública de Empleo de la Alcaldía de Medellín,
me detengo a observar como mi labor estrecha tanto la oferta y la demanda
laboral ya que nuestra función y actividad principal es intermediar y
cruzar los requerimientos de las empresas que actualmente participan en nuestro
proyecto de intermediación laboral y las hojas de vida de los cientos de
ciudadanos que recurren a nuestra oficina en búsqueda de una oportunidad.
A partir de nuestra política pública de empleo decente, es
vital resaltar una labor con sentido, pertinente y prolongada ya que nuestra
bandera es la contratación decente con respecto a un salario a unas
prestaciones sociales y por un tiempo adecuado.
Es por tanto que mi labor actualmente estará encaminada a la motivación de los
ciudadanos en la búsqueda de empleo decente pero más aún en la
utilización de una pedagogía adecuada para enseñarles a potenciar sus
habilidades y competencias en el mercado laboral, y recordar que finalmente
nuestra ciudad palpita a un ritmo más acelerado y nos muestra tendencias que
deben ser socializadas a los ciudadanos en búsqueda de una nueva
oportunidad.